Por Punto de Vista – la noticia vista de manera diferente
Riohacha, La Guajira – Un episodio que parece sacado de una historia absurda, pero que refleja el peligro latente en nuestras comunidades, tuvo lugar en la madrugada del 20 de junio en el barrio Villa Brasil. Un hombre, visiblemente alterado por el ladrido de un perro, desenfundó un arma de fuego y disparó directamente contra la vivienda de su dueño, hiriendo también a la indefensa mascota.
El hecho no solo causó consternación entre los vecinos, sino que encendió las alarmas de las autoridades. La PolicÃa Nacional, que patrullaba la zona en labores preventivas, fue alertada por una llamada telefónica. En cuestión de minutos, los uniformados llegaron al lugar y divisaron al presunto agresor huyendo hacia una zona boscosa. Gracias a una reacción rápida y coordinada, lograron interceptarlo y someterlo.
Durante el registro personal, los agentes hallaron un revólver calibre .38 con seis cartuchos en la pretina del capturado, un joven de 28 años, oriundo de esta capital, quien no contaba con permiso ni documentación del arma. Fue inmediatamente informado de sus derechos y puesto a disposición de la FiscalÃa URI de turno por el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Este hecho, más allá del asombro que genera, nos recuerda con crudeza que la intolerancia, sumada a la ilegalidad, puede desencadenar tragedias. ¿Qué habrÃa pasado si el disparo alcanzaba a una persona inocente?
La PolicÃa Nacional reitera su compromiso con la seguridad ciudadana e invita a la comunidad a seguir denunciando cualquier comportamiento que amenace la convivencia.
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